Al recibir el alta en neonatos tras 18 días de ingreso me invadió un enorme sentimiento de felicidad que me hacía sentirme en una nube, por fin lo habíamos logrado los 4 juntos, por fin empezaríamos a disfrutar de esa familia de 4 miembros que tanto nos había costado formar, nuestra lucha infinita por fin obtenía su recompensa y una nueva etapa comenzaba en nuestras vidas, pero ¿sabriamos hacerlo bien? junto al sentimiento de felicidad infinita se mezclaban sentimientos de duda, miedo, inseguridad, falta de confianza...si, nos daban el alta, pero no podíamos olvidar que nos llevábamos a casa un bebe de 2000 gr. y otro de 2100 gr. que necesitan ciertos cuidados especiales sumado a que mi marido terminaba la baja paternal.
Los primeros días decidimos que no queríamos recibir visitas de familiares o amigos ya que la primera recomendación que nos dieron en neonatos fue que debíamos evitar visitas innecesarias ya que toda persona puede estar incubando enfermedades que aún no se hayan manifestado y cualquiera puede trasmitirles una enfermedad infecciosa a la que estos niños están mucho mas expuestos que un bebe nacido a término, incluso nosotros debíamos lavarnos las manos cada vez que los tocábamos para evitar cualquier riesgo innecesario.
Otra recomendación es la temperatura ambiental en casa durante las primeras semanas por encima de los habituales 22 grados ya que los bebes prematuros pierden el calor corporal con mucha rapidez y si hace frío gastaran las pocas calorías que tienen en intentar mantener la temperatura, como forma de autorregular la temperatura es muy beneficioso el método canguro o método piel con piel que seguíamos haciendo en casa las primeras semanas.
La alimentación era el tema mas desesperante ya que las tomas se solapaban unas con otras dejandome un margen de media hora aproximadamente para descansar, tanto de día como de noche, llegué a perder la noción del espacio-tiempo en muchas ocasiones, en aquella época los mellis no eran capaces de succionar al pecho por sí mismos, así que tenía sacarme la leche con sacaleches (media hora aprox), darles el biberón a los dos (1-1.5 hora aprox), cambio de pañales, dormirlos al pecho con el calorcito de su madre...así que cuando los quería dejar en la cuna y tumbarme a descansar ya tenía que empezar de nuevo con el "ritual".
La parte buena es que en esta etapa el crecimiento de los bebes es rapidísimo y en muy poco tiempo conseguimos que todo este caos inicial se fuera normalizando, la gran mejoría llegó cuando alcanzaron los 3000-3500 gr. ¡Por fin tenían el peso de un niño nacido a término y nuestra vida dio un giro de 360 º!
Me apetece compartir con vosotros esta foto porque en ella se integran todos los elementos que os he contado en este post:
Podéis verme en mi sofá (mi gran aliado durante las primeras semanas) dándole el bibe a la vez a HIJO 1 y a HIJO 2 para economizar algo de tiempo entre tomas y al fondo esperándome impaciente HIJO 3 para sacar el alimento necesario para llenar los bibes para la siguiente toma.
Por si alguien se pregunta que fue de HIJO 3 a estas alturas debe de estar lleno de pelusas en el fondo más fondo del armario y no sabéis cuanto me alegro de no haber tenido mas noticias de el.
¡Qué madraza de dos!
ResponderEliminarY olé por mantener la lactancia materna con dos.
Me gusta mucho tu blog. Aunque no comente siempre,te leo mucho. Felicidades por este blog. ¡Me quedo por aquí! :-)
Gracias por tu piropo al blog, acabo de empezar como bloguera y me hacen mucha ilusion vuestros comentarios y me encanta que me leaís, respecto a la lactancia múltiple pienso que ahora es mas una ventaja que una desventaja ya que al tener 2 tengo el doble de estimulación y aunque los comienzos fueron duros hemos compartido momentos maravillosos que espero continuen mucho tiempo más
EliminarQue puedo decir, que eres una heroína, porque sin descansar y en el post parto es dificil mantener el equilibrio y las ganas. Enhorabuena.
ResponderEliminarTodas las madres somos heroinas, cuando nacen nuestros hijos nacemos nosotras como madres, mucho mas fuertes y mucho mas dispuestas a superar cualquier obstaculo que se interponga en la felicidad de nuestros hijos, somos capaces de todo lo que nos propongamos y por eso somos únicas
EliminarSeguro que en esta entrada no estás hablando de mi? me siento superidentificada jajaja.... es estupendo que hayas intentado mantener la lactancia materna y lo hayas logrado.
ResponderEliminarCreo que en esta entrada estoy hablando en nombre de cada madre de múltiples que se ha tenido que enfrentar a una situación similar, me alegro de que te sientas identificada porque hay veces que necesitamos saber que hay mas gente en nuestra misma situación, no soluciona nada pero nos ayuda a ver las cosas de otra manera y a "normalizar" la situación. Gracias por leerme ;)
EliminarLos primeros días son muy duros. Para mí lo fueron con uno (a pesar de la euforia que me causaron las hormonas). ¡No puedo imaginar cómo son con dos!
ResponderEliminarFuiste muy fuerte y valiente. Enhorabuena por haber conseguido la lactancia materna a pesar de las dificultades.
Hola guapa, creo que tu hijo 3 también es mi hijo, ¿Es el Medela Swing? Yo aún lo sigo utilizando una vez al día para sacarme leche que mi marido les da en biberón con cereales antes de irse al trabajo, así duermo un poquito seguido je je La verdad es que es un sacaleches muy cómodo y rápido aunque si volviese a ser madre de mellizos me compraría uno doble!
ResponderEliminarMis inicios fueron muy duros también. Mientras la niña estaba ingresada tenía al niño en la teta todo el día y el sacaleches para sacarme las 8 tomas diarias de 40 ml que le llevaba a la nena a Neonatología. Después, cuando la niña vino a casa le daba teta a ella pero también suplementaba con mi propia leche, la pobre no succionaba bien y no llegaba a los dos kilos. Poco a poco le fui quitando las tomas de biberón y no veas qué liberación. Por la noche lo que hacía era ponérmelos a los dos en el cojín de lactancia en posición de rugby en la cama, me rodeaba de almohadones y dormía medio sentada mientras ellos mamaban, se dormían, mamaban, volvían a dormirse...
Si!! Es el Medela Swing, parece ser que tenemos un hijo en común...jajajaja!
ResponderEliminarYo hace mucho que ya no lo utilizo, es más, una vez intenté sacarme cuando los mellis tenian unos 11 meses porque no me los pude poner a mamar en todo el día porque me pusieron un gotero y sólo conseguí sacrme 40 ml en mas de 30 minutos! Creo que me ha dejado traumatizada! Ahora he aprendido a sacarme a mano y si tengo necesidad así lo hago, es mucho mas cómodo y rápido
Estoy totalmente de acuerdo cuando dices que fué liberador conseguir que se engancharan los 2 al pecho, lo que para otra madre sería algo horrible, por verse con 2 bebes enganchados día y noche, para nosotras era una liberación porque se empezaba a normalizar la situación.
Las noches al principio fueron muy duras, yo tampoco sabía como colocarme ¡Siempre estaba incómoda! A veces tambien dormia como tu semi-sentada 1 o 2 horas en toda la noche ¡Que tiempos!